El Parque Central, recinto de sucesos de trascendencia histórica para Tuxtla Gutiérrez, ha sufrido diversas modificaciones desde 1570, cuando nació como un campo zacatoso, hasta hoy que lo revisten con pisos de cantera y piedra volcánica.
Aunque es conocido simplemente como Parque Central, su nombre oficial es Parque de la Libertad, sin embargo tuvo otros nombres como Plaza de Armas, 12 de octubre, y Rodulfo Figueroa.
Sitio de reunión de parejas y familias, que ocupaban sus bancas o buscaban la sombra de las ceibas milenarias y los árboles de laurel, el Parque Central de Tuxtla Gutiérrez es un sitio lleno de historia, aunque ahora la mayoría de quienes lo visitan forman parte de marchas y plantones.
Denominado oficialmente como Parque La Libertad, le hizo honor a ese nombre durante la administración municipal de Victoria Isabel Rincón Carrillo, cuando en 2003 se colocó ahí una réplica de la Estatua de La Libertad.
Dicha estatua fue removida del sitio durante el gobierno de Juan Sabines Guerrero y llevada al Parque de La Libertad, a un costado del Congreso local, junto al monumento a Belisario Domínguez.
Pero la réplica del monumento emblemático de Nueva York, no fue el único que tuvo al Parque Central como su morada, pues en 1892 fue colocada la estatua de Miguel Hidalgo y Costilla, mientras que el 16 de septiembre de 1897 albergó a la esfinge de Joaquín Miguel Gutiérrez.
El Parque Central es único en el estado por su extensión, está rodeado por el Palacio de Gobierno, sede del Poder Ejecutivo, la Presidencia Municipal, el Palacio de Gobierno federal, edificio de cinco pisos que alberga oficinas públicas federales, también colinda con la Catedral de San Marcos y el Palacio Legislativo, sede del Congreso local.